El cambio de estaciones afecta a todos los seres humanos, pues todos los elementos del entorno son capaces de incidir directamente en el estado anímico y físico.
Las bajas temperaturas del invierno pueden hacerle sentir retraído y limitar su movimiento. Por el contrario, los días más largos y el calor primaveral pueden hacer que sus energías se renueven. La primavera es el momento ideal para emprender actividades que mejoren su salud, así que vale la pena aprovecharla al máximo.