Una visa de no-inmigrante le permite a una persona viajar a un puerto de entrada de los Estados Unidos (típicamente en la frontera o el aeropuerto) y solicitar permiso para poder visitar por un propósito específico. El propósito específico puede ser casi cualquier cosa y lo visa de no-inmigrante permite que una persona se quede temporalmente. Un solicitante de una visa temporal también tiene que tener una residencia en el extranjero que no tiene intención de abandonar. El periodo de tiempo exacto que una persona se puede quedar depende del estatus bajo el que una persona entra. Una persona admitida bajo en estatus puede ser elegible para cambiar su estatus para quedarse mas tiempo o para cambiar el propósito de su visita por la cual se queda.